Por cosas del destino, no pude tocar la máquina de coser en toda la semana pasada, y a finales de la misma, las manos me temblaban a causa del síndrome de abstinencia. Tengo pendientes unos cuantos proyectos pero todos ellos dependían de la máquina de coser, así que me las ingenié para buscar algo que implicara coser a mano y que no me ocupara mucho tiempo.
Así nació Ataulfo.
El viernes por la mañana, estando yo en el trabajo, googleaba tranquilamente cuando acabé viendo páginas de manualidades. Teniendo yo el mono que tenía, mi única manera de tranquilizar esa ansiedad era viendo los trabajos costuriles que otra gente colgaba en la web. ¿Sabéis la cantidad de gente que no se conforma con comprar las cosas hechas, sino que se preocupan en buscar maneras de crear con sus manos? No solo ropa, que eso ya me parece loable, sino todo tipo de complementos y accesorios. Como broches, pulseras, clips para el pelo, colgantes, collares o cinturones. Hay un mundo entero de manitas que hacen pequeñas obras de arte con metal, madera, tela o fimo.
Y curioseando en esas páginas, empezó a formarse un nuevo proyecto en mi cabeza. Uno que se adecuaba a mis actuales condiciones. En ese proyecto había fieltro, hilo transparente y un pulpo.
Y así nació Ataulfo.
Ataulfo El Pulpo es la nueva mascota de David (Arael). Y esa cara de cabreo es porque David no le hace ni puñetero caso. Se lo deja olvidado en los bares, con la cuenta sin abonar. Cuando va al baño para refrescarse, David le pone el agua caliente en lugar de fría y se le calientan los tentáculos y lo peor de todo es que le deja siempre sin reservas de tinta.
Y el siguiente... un gato!
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